Al calor de un fino susurro llueve,
y al oído tus palabras me caen.
como mariposa tus labios se posan
en cada poro de toda mi piel.
El calor de un cuerpo enardecido
enciende la noche con luna
y entrelaza con la aurora.
y entrelaza con la aurora.
Entre sabanas de seda
confidente la almohada calla,
el que al runrún de un compás marca,
y silencia la vida diaria
porque hay aquí y ahora
solo palabras de amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario